Temperaturas de menos de 180 grados centígrados, tormentas que duran meses, un huracán que lleva existiendo más de 30 años. Todo indica que es imposible la existencia de vida, pero…
Esta es la carta de presentación que nos muestra Saturno. Sexto planeta del Sistema Solar, segundo más grande después de Júpiter y el único que posee una densidad inferior a la del agua (90% de hidrógeno y 5% de helio). “Si lo dejásemos caer sobre un océano de su magnitud este quedaría flotando”, aseguran científicos de la NASA.
Una de las características más notables de este enigmático planeta es su sistema de anillos y sus 62 satélites hasta ahora conocidos (y 3 posibles más).
Muchos de estos satélites han sido descubiertos recientemente por la misión Cassini-Huygens. Una misión espacial puesta en marcha conjuntamente por la NASA/ESA (European Space Agency) /ASI (Agenzia Spaziale Italiana).
Esta misión espacial no tripulada está formada por la nave Cassini, cuyo nombre proviene del italiano Giovanni Domenico Cassini, uno de los más importantes astrónomos del S. XVII y XVIII, y la sonda Huygens en memoria del también astrónomo, pero en este caso holandés Christiaan Huygens quien determinó el sistema de anillos de Saturno en 1659.
El orbitador Cassini-Huygens que fue lanzado el 15 de Octubre de 1997 y que alcanzó la órbita de Saturno el 1 de Julio de 2004 ha aportado a la comunidad científica innumerables e incalculables datos, como en el 2005 la existencia de actividad volcánica solo comparable a la de la tierra, así como infinidad de imágenes de Saturno y sus anillos.
Pero había algo más, algo que estaba fascinando y a la vez inquietando a los científicos de todo el mundo. Algo por lo que se había hecho viajar al orbitador más complejo y grande jamás construido (6.8 m de longitud y 4 m de diámetro) durante casi 7 años por el espacio. Algo que iba a ser estudiado minuciosamente por la sonda Huygens; sus lunas Titán y Encélado.
¿Por qué pararse a estudiar estos satélites en vez del mastodóntico planeta? La respuesta está clara, en estas lunas había algo que era de necesaria importancia para la NASA y la ESA, que les llevaba intrigando demasiado tiempo.
Cuando el 14 de Enero de 2005 la sonda Huygens ingresó en la órbita de Titán, el más grande de todos los satélites de Saturno (5.150 km de diámetro), se pudo constatar con firmeza rigurosa que poseía una atmósfera significativa. Esta densa atmósfera está compuesta principalmente por nitrógeno como la de nuestro planeta, que es un elemento clave para la formación de la vida.
Científicos de la NASA aseguran que la atmósfera de Titán puede ayudar a entender cómo se formó la de la Tierra.
Aunque no se encontró agua, si hallaron evidencias de inundaciones en las fotografías que envió la Huygens.
Pero había más, mucho más. Entre los científicos de la misión empezó a sonar otro nombre con gran fuerza, Encélado.
Y fue en Marzo de 2006 cuando la sonda Huygens llegó a esta luna de Saturno.
El pequeño Encélado de 498.8 Km de diámetro guardaba un secreto que iba a activar a la comunidad científica. El Cassini con su sonda Huygens había descubierto gran cantidad de agua (posiblemente helada) en uno de sus Polos, que estaba siendo expulsada a la atmosfera como si de miles de géiseres se tratara.
Bob Brown, científico de la Universidad de Arizona, EE.UU, nos dice que “para que exista la vida como la conocemos, es necesario la presencia de agua líquida, energía y moléculas orgánicas, cóctel que está presente en. Encélado.”
No quedó todo ahí, también se aprecio una más que significativa atmósfera.
Pero lo más sorprendente fué que, por primera vez se detectaban sales de sodio (la sal común de mesa de consumo humano) en granos de hielo del anillo E de Saturno. Anillo que se reabastece directamente de las emisiones de vapor de agua y partículas de hielo de Encélado.
Según la ESA este hielo salado indica que en Encélado podría haber agua en estado líquido, incluso un océano subterráneo.
Y así lo explica Frank Postberg, científico de Cassini en el Analizador de Polvo Cósmico del Instituto de Física Nuclear Max Planck de Heidelberg, Alemania… “Nuestras mediciones implican que además de sal, los granos también contienen carbonatos como la sosa; ambos componentes en concentraciones que coinciden con la composición prevista de un océano en Encélado. Si la fuente del líquido es un océano, esto, unido al calor medido en la superficie cercana al polo sur de esta luna y a los compuestos orgánicos hallados, podría configurar un entorno en Encélado adecuado para la formación de precursores de vida.”
No deja de ser significativo que una misión espacial que nació allá por el año 1997 y que tenía como vida útil hasta el 2008, ahora tras una gran inyección económica (60 millones de dólares al año, que se sumarán a los 3.400 millones de dólares de su presupuesto inicial) tenga previsto su ocaso definitivo en el año 2017. Prácticamente 9 años de andadura extra gracias a fondos que podían haber sido destinados a otras misiones de más renombre para la opinión pública, pero que se ha decidido que recaigan en este esperanzador y asombroso proyecto.
Parece que estamos solos y digo parece porque cada vez encontramos más evidencias de que la vida más allá de la tierra es posible. El camino que nos queda por recorrer va a estar lleno de descubrimientos sorprendentes, que nos acercarán cada vez más a la respuesta de esa gran pregunta que todo ser humano se ha hecho alguna vez en su vida… ¿Hay alguien ahí?. Puede que esta vez gracias a la Cassini-Huygens consigamos por fin respuestas.
Ahora sólo tendremos que luchar para que no nos cambien las preguntas.
Carlos Camacho
me gusta mucho pero me gustaria saber si hay vida por k estoy haciendo un trabajo
Saludos Natalia, pues en Saturno probablemente no, pero algunas de sus lunas, especialmente en Encélado y Titán. Hablamos de ello en nuestro programa 13 de la primera temporada, 1×13
Enlace > [Vida extraterrestre en el Sistema Solar, desde Mercurio a Plutón pasando por Europa ]
Algún día traerán agua de otro planeta para salvar al nuestro 🙂 “idea loca” jjj
la verdad me gustaria conocer todo el sistema solar que envidia q los cientificos lo conoscan y yo no es interesante
ME INTERESA MUCHO EL TEMA HOGALA QUE SIGAN INVESTIGANDO EL TEMA DE SATURNO LES DOY TODA MIS BUENAS VIBRAS
Me pregunto si algún día se encontrará vida inteligente en el planeta tierra. A lo mejor primero se encuentra en Saturno, y nos pueden hacer una transferencia de conocimientos, o si no, en Jacinto….
Hola,
Tengo que admitir que os lo habéis currado bastante la web y ya sabéis, yo valgo por dos personas (Portugal y España) os sigo a diario para ver las Novedades, cada artículo tiene su suspense, dais información real basada en estudios de muchas horas.
Bueno a todos os deseo lo mejor,
Un Abrazo fuerte,
Sonia
Estupendo articulo, gracias por dar luz a los que queremos conocer. Ahora solo nos cabe esperar que, como siempre, no nos oculten la información.
Enhorabuena por tu primer articulo, sigue así!
Ánimo, sigue investigando… este tema nos interesa a toda la humanidad… Me ha gustado mucho!
Muy currado, ciertamente la vida en otros planetas siempre es un tema que atre mucho a la gente interesada en saber que hay mas alla de el planeta azul.
Felicidades tron!