Una investigadora en un laboratorio
La Listeria o listeriosis es una infección grave causada por el microbio Listeria monocytogenes. La contaminación por listeria se produce por lo general a través del consumo de alimentos contaminados por el virus. Esta enfermedad afecta principalmente a mujeres embarazadas, ancianos, personas con un sistema inmunológico debilitado o recién nacidos.
Para las embarazadas la listeria no suele desarrollar síntomas graves, pero sí que puede hacerlo en el feto. En adultos y mayores la enfermedad suele traducirse en infecciones graves del torrente sanguíneo o el cerebro pudiendo en este caso causar meningitis o encefalitis.
Síntomas
Los síntomas de la listeriosis pueden ser muy variados en función de la persona o la parte del cuerpo que afecte. De manera general e incipiente puede causar fiebre y diarrea. Sin embargo, esto también puede provocarlo una infección por otros microbios transmitidos por los alimentos. Los síntomas que distinguen a la listeriosis de otras infecciones se manifiestan cuando esta se ha propagado más allá de los intestinos.
Si la infección se contrae en el embarazo y el microbio se propaga de forma invasiva la enfermedad puede llegar a causar aborto espontáneo, parto prematuro o infecciones en el recién nacido. El resto de personas que puedan contraer listeriosis manifestarán síntomas como dolor de cabeza, rigidez de cuello, confusión, pérdida del equilibre, fiebre y dolores musculares.
Las personas que contraigan listeriosis invasiva generalmente reportarán estos síntomas entre una y cuatro semanas después de haber consumido los alimentos contaminados. Sin embargo, se han dado casos en los que las personas infectadas han desarrollado los síntomas hasta setenta días después, o tan pronto como el mismo día de la exposición.
Fuente y más información:
Diario 20minutos