Alumnos estudiando, en una imagen de archivo.
Hasta ahora nos creímos cada vez más listos basándonos en el denominado efecto Flynn. Según este efecto, en el siglo XX el coeficiente intelectual de la población subía tres puntos en cada generación. Varias teorías explicaron este crecimiento intelectual por las mejoras en la nutrición, la salud o la educación, sin embargo parece que esta tendencia ha cambiado.
Las nuevas generaciones tienen una inteligencia es cada vez menor, es decir, nos volvemos más tontos con los años. Así lo afirma un estudio noruego publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS).
El punto de inflexión de esta tendencia se produce en 1975, a partir de este año el coeficiente intelectual de la población comenzó a caer al menos siete puntos por generación.
El equipo del Centro de Investigación Económica Ragnar Frisch en Noruega estudió hasta 730.000 coeficientes de jóvenes noruegos que hicieron el servicio militar obligatorio entre 1970 y 2009. Entre los resultados constataron que, por ejemplo, quienes nacieron en 1991 tuvieron un coeficiente intelectual cinco puntos menor que los nacidos 16 años antes.
Los autores de la investigación descartan que la inteligencia esté vinculada a la genética, es decir, la causa de este menor coeficiente intelectual no está vinculada a la familia. Aunque no establecen una única causa, plantean que los nuevos métodos educativos podrían influir.
Fuente y más información:
Diario 20minutos